Las fosas sépticas son fundamentales en el tratamiento de aguas residuales sin alcantarillado. Existen diferentes tipos según el material de construcción: hormigón, ladrillo, acero inoxidable, fibra de vidrio y polietileno. También se clasifican según el proceso de tratamiento: acumulación, filtro biológico y oxidación total.
Las fosas pueden tener uno, dos o tres compartimentos, mejorando el rendimiento. Es importante mantenerlas limpias y evitar productos dañinos. Descubre más sobre los tipos de fosas sépticas en esta guía.
¿Qué tipos de fosas sépticas existen?: Según el material de construcción
En el tratamiento de aguas residuales, existen diferentes tipos de fosas sépticas según el material utilizado en su construcción. A continuación, se describen dos de los materiales más comunes:
Hormigón, ladrillo y acero inoxidable
Las fosas sépticas fabricadas con hormigón, ladrillo y acero inoxidable son altamente duraderas y resistentes. El hormigón y el ladrillo ofrecen una buena capacidad de almacenamiento y, además, son sólidos y estables, capaces de soportar las condiciones más adversas. Por otro lado, las fosas sépticas de acero inoxidable son altamente resistentes a la corrosión y ofrecen una larga vida útil.
Fibra de vidrio y polietileno
Por otro lado, las fosas sépticas fabricadas con fibra de vidrio y polietileno destacan por su resistencia a la corrosión y su fácil instalación. La fibra de vidrio es ligera y resistente, lo que facilita su transporte e instalación. Por su parte, el polietileno es un material plástico muy duradero y de fácil mantenimiento, que ofrece una excelente resistencia a los impactos y a los riesgos geológicos.
Fosas sépticas según el tratamiento de las aguas residuales
Según el proceso de tratamiento del agua residual existen diferentes tipos:
Fosas sépticas de acumulación
Las fosas sépticas de acumulación son un tipo de sistema que se encarga de recibir y almacenar las aguas residuales. Sin embargo, no realizan un tratamiento directo de los residuos. Es necesario contar con el servicio de una empresa especializada para realizar periódicamente el vaciado y limpieza de la fosa, siguiendo las normativas correspondientes para el correcto manejo de las fosas sépticas.
Fosas sépticas de filtro biológico
Las fosas sépticas de filtro biológico son sistemas diseñados para reducir en más del 80% el volumen de aguas residuales almacenadas mediante el uso de filtros biológicos. Estos filtros permiten el tratamiento posterior de las aguas. Al igual que las fosas de acumulación, es fundamental contar con una empresa especializada para la limpieza periódica y el mantenimiento adecuado de estos sistemas.
Fosas sépticas de oxidación total
Las fosas sépticas de oxidación total son capaces de depurar aproximadamente el 90% de las aguas residuales que reciben. Este tipo de sistema utiliza un proceso de recirculación de fangos para lograr un tratamiento más eficiente. Las bacterias presentes en la fosa contribuyen al proceso de oxidación de los residuos, permitiendo una mayor eliminación de contaminantes y, a su vez, mejorando la calidad del agua tratada.
Estructura de las fosas sépticas
La estructura de las fosas sépticas juega un papel fundamental en su funcionamiento eficiente y en el tratamiento adecuado de las aguas residuales. A continuación, analizaremos los diferentes aspectos relacionados con la estructura de estas fosas sépticas.
Compartimentos de las fosas sépticas
La estructura de las fosas sépticas juega un papel fundamental en su funcionamiento eficiente y en el tratamiento adecuado de las aguas residuales. A continuación, analizaremos los diferentes aspectos relacionados con la estructura de estas fosas sépticas.
Primer compartimento
En el primer compartimento, conocido como compartimento de recepción, se produce la entrada del agua residual para su tratamiento inicial. Aquí, ocurre la decantación y sedimentación de los sólidos más pesados, que se acumulan en el fondo de este compartimento.
Segundo compartimento
El segundo compartimento, llamado compartimento de digestión o digestor, es donde se lleva a cabo la acción bacteriana para descomponer y reducir los sólidos orgánicos presentes en el agua. Las bacterias presentes en la fosa séptica se encargan de este proceso, contribuyendo al tratamiento de las aguas residuales.
Tercer compartimento
En algunas fosas sépticas más grandes, puede haber un tercer compartimento, conocido como compartimento de efluentes o salida. En este compartimento, el agua ya tratada pasa por una última etapa de separación antes de ser liberada al entorno o conducida hacia un sistema de drenaje adecuado.
La presencia de compartimentos en las fosas sépticas permite una mayor eficiencia en la separación de sólidos y líquidos, así como en el tratamiento de las aguas residuales. Esto asegura que el agua tratada sea de mejor calidad y cumple con los estándares ambientales y sanitarios.